La modelo rusa, conocida por ser la ex de Ronaldo, ha vuelto a posar ligera de ropa. Lo ha hecho para la revista Sorbet, donde ha emulado a la famosa foto de los años ochenta de Nastasja Kinski.
Irina se muestra más guapa que nunca tras su ruptura con Cristiano Ronaldo. Una relación que parece haber quedado en el pasado ya que próximamente se transladará junto a Bradley Cooper, su nuevo novio, a vivir a Londres.