La Eurocopa sub 21 de Italia y San Marino entra en su recta final. Las mejores canteras de las selecciones del continente se han visto las caras y han ganado las de casi siempre. Las semifinales ya están fijadas y en ellas se han metido tres habituales: España, Alemania y Francia. Rumanía se ha colado entre ellas.
Interwetten ha realizado un estudio de las promesas que podían acabar de despuntar en el torneo en una segunda línea por detrás de los consagrados Jovic o Moise Kean. Dos de los tres jugadores que se han analizado están dando ese paso adelante. Se trata de Dani Olmo y Maximilian Eggestein, que se han convertido en piezas importantes en sus respectivas selecciones: España y Alemania.
Puede que ambos se vean las caras en la gran final. Sobre el papel será el español el que más complicado lo tenga, pues Francia siempre es un oponente temible. El germano tendrá que hacer frente a la pujante Rumanía, una selección con menos nombre, pero que si se ha metido en la semifinal será por algo.
Dani Olmo ha cumplido con las buenas expectativas que se habían depositado en su persona. Ha logrado entrar en el ‘once’ tipo de Luis de la Fuente con unas intervenciones más que satisfactorias. Antes de entrar en el torneo era una pieza apetecible para muchos equipos importantes europeos, ahora se ha revalorizado. La rumorología incluso habla de un alto interés por parte del FC Barcelona.
Maximilian Eggestein también ha sabido aprovechar sus oportunidades en esta Eurocopa sub 21 de Italia y San Marino. Ya es un jugador de peso en su equipo, el Werder Bremen, y en la Bundesliga. Su valor de mercado está situado en torno a los 30 millones, pero su caché podría subir más. También se ha convertido en un habitual entre los titulares de Alemania, por lo que se espera que esté sobre el césped ahora que llega la hora de la verdad.
Había un tercero en el mencionado estudio, Dodi Lukebakio, que se ha visto penalizado por el mal resultado global de los suyos. Bélgica perdió sus tres encuentros ante selecciones complicadas como España, Italia y Polonia. Disputó todos los minutos en esos tres partidos, pero el delantero no tuvo suerte de cara al gol.
Tampoco es nada que deba preocupar en exceso al belga, individualmente hablando. Su buena temporada en el Fortuna Düsseldorf, con el que marcó diez goles, es muestra de su progresión. A sus 21 años, con su velocidad y capacidad de regate, tiene todo para llegar muy lejos en el fútbol mundial. Que se lo pregunten al Bayern o al Borussia Dortmund.
Lukebakio regresará la próxima campaña al Watford de la Premier League, el equipo que tiene sus derechos.