El ‘Caso Negreira’ no ha hecho más que empezar.
Después de que saliese a la luz que el Barcelona pagó, desde el 2001 hasta 2018 por unos 7 millones de euros a el ex número dos de los árbitros por sus servicios «informes técnicos verbales» sobre los árbitros, las investigaciones por todo el revuelo y los chanchullos siguen su cauce.
Tras declarar Josep María Bartomeu o Albert Soler (ex alto cargo del Gobierno y miembro de la Junta de Bartomeu), entre otros, la Unidad de la Policía Judicial adscrita a la Fiscalía pidió a Negreira que fuese a declarar.
Sin embargo, tal y como ha informado en la mañana del martes 21 de febrero el diario El Español, Enríquez Negreira se acogió a su derecho de no declarar argumentando que tiene alzhéimer. Dependiendo del grado de su enfermedad, podría llegar a no tener responsabilidad penal en el hipotético caso de que cometiera presuntas.
Amenazó a la Federación de Rubiales
El escándalo es histórico, lamentablemente, para el fútbol español. En la noche del pasado lunes 20 de febrero, El Mundo desveló que Enríquez Negreira, en 2018, amenazó a a Federación Española tras ser destituido como número dos de los árbitros con la llegada de Luis Rubiales, que decidió renovar el Comité Técnico de Árbitros CTA).
Nada más enterarse de la noticia, Negreira, que era el vicepresidente, rogó a la Federación la creación de un asociación de ex colegiados asegurando que él podía ser el presidente. Sin embargo, la Federación se negó y Enríquez Negreira volvió con las mismas amenazas verbales que dijo a Bartomeu. Además, también reclamó otra indemnización millonaria al organismo.
Su modus operandi fue exactamente el mismo que hizo con el Barça y Bartomeu: remitir un burofax, en este caso a la RFEF, argumentando que su labor fuera reconocida a efectos laborales durante 24 años. El único que realmente ingresaba por su actividad era Sánchez Arminio, el entonces presidente del CTA.
Además, la obsesión del ex número dos de los árbitros era trabajar con Velasco Carballo y crear la ya mencionada asociación de antiguos árbitros presidida por él. Las constantes estrategias de Enríquez Negreira solamente aumentan más las sospechas de presuntas ilegalidades junto al FC Barcelona.

Enríquez Negreira y su hijo
Las imágenes que desveló Josep Pedrerol en Jugones donde se aprecia al hijo del ex colegiado acompañando a los árbitros al Camp Nou es otro aliciente más de que podrían tener apalabrada esas presiones para que pitasen a favor del club culé.