El técnico del Regal FC Barcelona, Xavi Pascual, reconoció tras caer derrotado en el tercer partido de la serie final por el título ACB, que confiaban en haberle dado la vuelta al 0-2 en contra con el que llegaron a Vitoria, y lamentó que la gran temporada del equipo haya tenido este triste colofón.
El preparador felicitó al Caja Laboral por su victoria y señaló que la serie estuvo marcada por «la máxima igualdad», pero fueron «los pequeños detalles» los que decidieron. «Hemos luchado y llegamos pensando que podíamos darle la vuelta a la eliminatoria», admitió.
«Es cierto que el 0-2 pone mucha presión, pero realmente creíamos en nuestras opciones. Hemos peleado cada balón hasta el último minuto. Con un poco más de acierto quizás hubiéramos ganado», aseguró Pascual, que lamentó que «un final extrañísimo» en la prórroga ha puesto punto final a «una temporada que ha sido brillante».
No obstante, dejó claro que el Regal FC Barcelona no perdió esta noche la final, sino que lo hizo en Barcelona, especialmente en el primer partido». «Ha sido, hasta el 9 de junio, una temporada perfecta, pero del 9 de junio al 15 se ha estropeado», concluyó. GRIMAU, AUTOCRITICO
De la misma opinión era Roger Grimau, que fue crítico con el juego de su equipo por los «muchos errores» cometidos durante la final, que ha terminado pagando «caro». «Un equipo como el Regal FC Barcelona no puede perder 3 partidos de forma consecutiva. Lo hemos hecho ante un gran equipo, que ha jugado muy bien, y sólo queda hacer autocrítica y felicitar al campeón», añadió.
«Lo habíamos preparado bien, pero ellos han sido superiores y perder ha sido culpa nuestra, no podemos echarle la culpa a nadie. Hoy hemos estado más agresivos y mejor en defensa, pero pequeños detalles y tonterías han acabado decidiendo el partido», analizó Grimau.
El jugador catalán reconoció que lo ocurrido supone un golpe anímico para el equipo. «Ahora mismo no estamos bien, porque llevábamos un gran año y ha tenido que acabar así». Aún así, consideró que deben «orgullosos del equipo».
