El base reserva Tony Douglas llegó al United Center de Chicago para convertirse en el protagonista del partido que su equipo, los Knicks de Nueva York, ganaron por 120-112 a los Bulls en Chicago.
Douglas con 30 puntos, su mejor marca personal como profesional, encabezó el ataque de los Knicks, que anotaron 16 de 24 tiros de campo para romper por completo la defensa de los Bulls.
El acierto de los Knicks con los triples sorprendió no sólo a los Bulls, sino al propio neoyorquino después de haber tenido sólo un 29,1 por ciento de acierto en los tres primeros partidos de la nueva temporada que habían disputado.
Douglas fue el que encabezó la inspiración encestadora de los Knicks al acertar con cinco de nueve tiros desde fuera del perímetro y estar perfecto 7-7 desde la línea de personal.
El alero italiano Danilo Gallinari también logró cuatro triples sin fallar ninguno de los intentos que hizo para aportar 24 puntos, todos menos tres conseguidos en la primera parte cuando los Knicks se fueron al descanso con la ventaja parcial de 52-70.
El base Raymond Felton, uno de los fichajes de los Knicks durante el descanso veraniego, también estuvo inspirado en los triples al anotar 4 de 6 y concluir el partido con un doble-doble de 20 tantos y 10 asistencias.
El ala-pívot Amare Stoudemire, el nuevo hombre franquicia de los Knicks, contribuyó con 14 puntos y ocho rebotes para que el equipo neoyorquino consiguiese su segundo triunfo en lo que va de la nueva temporada.
Después de haber sufrido dos derrotas con marcadores muy cerrados ante los Celtics de Boston y los Trail Blazers de Portland, en su campo, donde el martes no pudieron enfrentarse a los Magic de Orlando por el problema de los escombros contaminados con amianto tóxico que cayeron del techo del Madison Square Garden, el triunfo ante los Bulls es un revulsivo.
Los Knicks ahora regresan a su campo, que ya ha recibido la luz verde para que se puedan disputar partidos, y mañana, viernes, se enfrentaran a los Wizards de Washington.
Esta vez, los Bulls a pesar del doble-doble del base Derrick Rose que aportó 24 puntos con 14 asistencias no pudo hacer el milagro de la remontada y en el entrenador Tom Thibodeau ante la gran diferencia que había en el marcador con 10 minutos para concluir el partido le dio descanso aunque el público pidió su continuidad.
Los gritos de «We want Rose! (¡Queremos a Rose!) no hizo cambiar de parecer a Thibodeau.
El escolta Kyle Korver aportó 18 puntos y el alero de origen sudanés Luol Deng se quedó con 17 tantos después de haber tenido en el partido anterior del pasado lunes ante los Trail Blazers, su mejor marca como profesional al llegar a las 40 anotaciones.
Los Bulls (2-2) tendrán que viajar hasta Boston, donde mañana se van a enfrentar al equipo local de los Celtics y para el entrenador Thibodeau será algo especial ya que vuelve al campo, donde las últimas temporadas estuvo como entrenador asistente de Doc Rivers, que fue su protector.
«Como profesional mi pensamiento ya no está en Boston, donde pasé tres últimas temporadas excepcionales, pero ahora todo mi esfuerzo debe ser puesto en convertir a los Bulls en un equipo ganador ante cualquier rival, incluidos los Celtics», señaló Thibodeau.
