El comienzo de la temporada en la NBA continúa seriamente en riesgo después de que la reunión entre los jugadores y los propietarios de este martes en Nueva York acabó sin un acuerdo, por lo que la amenaza del ‘lockout’ se mantiene firme.
Así, la liga canceló la totalidad de la pretemporada y hará lo propio con las dos primeras semanas de la Fase Regular si no se alcanza un acuerdo el próximo lunes.
«No hemos podido hacer los progresos que esperábamos que podríamos hacer y no pudimos continuar las negociaciones», aseguró con rotundidad David Stern, comisionado de la NBA, que señaló que se había ofrecido a los jugadores el 50 por ciento de los ingresos, superior al 47 por ciento que demandaban con anterioridad.
Este es uno de los puntos claves de la negociación y Derek Fisher, presidente de la Asociación Nacional de Jugadores apuntó que habían bajado su oferta al 53 por ciento de su participación, cuatro puntos menos que en el acuerdo que expiró el pasado 1 de julio, pero que la oferta no había sido aceptada por los propietarios.
«Creo que intentaron un acuerdo, pero en sus términos», advirtió por su parte Billy Hunter, Director Ejecutivo del sindicato de jugadores. «Nuestros chicos han mostrado una buena disposición para perder partidos», añadió.
Además, los pronósticos son pesimistas de cara al futuro. «No ha habido ninguna discusión sobre próximas reuniones, quizás en un mes, dos. En este momento, hemos roto las negociaciones», aseveró Hunter.
«Hoy no era el día para conseguir algo», comentó con seriedad Derek Fisher, presidente de la Asociación Nacional de Jugadores y base de Los Angeles Lakers a la salida del encuentro, que duró cerca de cuatro horas. «No pudimos acercar lo suficiente nuestras posturas», recalcó.
El base de los Lakers, acompañado por Kobe Bryant, Paul Pierce, Kevin Garnett y Ben Gordon, dejó claro que trabajarán «de forma colectiva» y que desde esa situación tomar decisiones «en consecuencia».
De este modo, todo parece indicar que la mejor liga del mundo sufrirá su segundo, de momento, retraso en el inicio. En 1998-1999, la competición quedó reducida a 50 partidos, y los jugadores no están dispuestos a firmar un mal acuerdo para encontrar una rápida solución.
En caso de suspenderse la temporada, Europa se podría ver beneficiada con la llegada de las estrellas de la NBA, aunque algunos jugadores como Deron Williams, Rudy Fernández o Andrei Kirilenko ya han oficializado sus fichajes por el Besiktas, el Real Madrid y el CSKA, respectivamente, y Kobe Bryant podría recalar en la Virtus italiana.
