El entrenador del Real Madrid, Pablo Laso, aseguró que se siente «muy orgulloso» de su equipo, que jugará su tercera final consecutiva de Euroliga tras cometer «muy pocos errores» ante Fenerbahçe, y que se medirá a un Olympiacos sobre el que «ya nadie dirá que no es favorito» dos años después de la última final, «un partido nuevo» que encara sin ánimo «revanchista».
«No soy muy revanchista. Mi manera de ser es mirar hacia adelante y no hacia atrás. Me pesa más lo que tengo delante que el pasado. El del domingo será un partido nuevo ante un Olympiacos que es un equipo muy reconocible y con un núcleo importante en los últimos años, muy atlético. Y luego está el de siempre. Nadie dirá ya que no son favoritos», explicó Laso en rueda de prensa, en clara referencia a Spanoulis. Además, Laso realizó un análisis sobre el griego: «Siempre el entrenador contrario está preocupado por Spanoulis. Lo más importante es esa forma de no ser efectivo, y luego ser capaz de anotar al final y tener confianza. Si pongo a cinco defendiendo a Spanoulis anotará otro, como Printezis. Es clave, pero tiene grandes jugadores alrededor». «He repetido mucho que al final las palabras presión y motivación van muy ligadas. Lo mismo puede parece positivo o negativo. Por supuesto que las tenemos, al igual que Olympiacos, y valoramos mucho el llegar aquí, porque es muy difícil. Es algo que habla muy bien de ambos equipos, no me gustaría pensar solamente en eso para valorar el trabajo de un equipo», explicó sobre la grandeza de la cita. Del mismo modo, sobre el estado anímico de su plantilla, destacó que «han sido capaces desde el principio de pasar página de las derrotas de las últimas finales, y centrarse en ganar la próxima», destacando la «ambición para llegar hasta aquí», que le hace estar «orgulloso desde el primer partido», reconociendo que están «mejor físicamente» que hace un año a estas alturas. «Ha sido una victoria muy difícil desde el principio, y en el segundo cuarto abrimos bien al equipo y conseguimos un gran liderato al descanso. Eso era muy peligroso, porque sabíamos que en la segunda mitad algo iba a pasar y supimos controlar bien las emociones y el marcador», analizó Laso sobre el partido. Del mismo modo, reconoció que «ha habido muy pocos errores» en el juego de los suyos, y destacó la gran labor de Sergio Rodríguez y Sergio Llull en el movimiento del balón, aunque sentenció que necesitan «al mejor Rudy, al mejor Sergio y al mejor Nocioni» para la final. «Es obvio que Ayón ha realizado un crecimiento personal. Nos está dando muchas cosas, y hoy ha hecho un grandísimo partido. Hay veces que los números le brillan menos, pero valoramos su trabajo, sobre todo porque venía de una situación complicada», piropeó Laso al mexicano tras su actuación.
