Curry está enamorando al mundo del basket.
El base de Golden State se supera a sí mismo y llega a los 100 triples en sólo 19 partidos y empieza a no ser de este planeta o al menos esa es la única explicación posible para su rendimiento.
Esta temporada Curry está demostrando el nivel que enamoró a miles de aficionados, con su precisión y el malabarismo que le caracteriza. De momento, domina por completo la NBA y se postula a estas alturas como el gran favorito para llevarse el MVP de la competición, que últimamente ha estado cuestionada debido a las altercados provocados alrededor de la figura de LeBron James en el partido hace una semana en el que éste dejó sangrando a un rival por un codazo.
Y todo con una facilidad y una naturalidad que hacen pensar en que lo suyo no es de este mundo. El base anotó siete triples de 13 intentosy volvió loco a los Clippers. Curry, lleva desenfundando su fusil desde el arranque de la temporada, pues en total lleva 105 triples anotados en los 19 partidos. Con estas cifras supera sus mejores registros como el jugador más rápido en llegar a los 100 tiros de tres anotados en una campaña, superando los 20 encuentros que necesitó en 2015 y 2018.
Pero esto por mucho que el jugador de los «Warriors» no quiera sumirlo, no es ni medio normal aunque nos hayamos acostumbrado a estas exhibiciones como la que dio ante los angelinos reventando la canasta una y otra vez con tiros de tres.
Cuando parecía que el encuentro contra los Clippers estaba abierto en el último cuarto, Curry sentenció y quemó el aro con tres triples, cada uno diferente, que hicieron que el partido reventara hasta el 77-95 cuando restaban 5:20 por jugarse. Un triple tras otro. Así de fácil lo hace este jugador.
