El ministro de Deportes de Brasil, Orlando Silva, admitió hoy que el Gobierno piensa en un «Plan B», con la reducción de doce para ocho del número de ciudades que albergarán el Mundial de Fútbol de 2014, en caso de que no se cumpla el cronograma de obras previsto para la competencia.
«En el caso de incumplir el plazo de inicio de las obras, el ‘Plan B’ para el Mundial es la exclusión de ciudades», aseveró Silva durante su participación en el Foro Empresarial de Comandatuba, que reúne en el nororiental estado de Bahía a industriales y representantes del Gobierno.
Los estadios seleccionados para el Mundial tendrán que pasar por grandes reformas para ajustarse a las exigencias de la FIFA y algunos serán construidos en su totalidad.
«Puedo asegurar que si una ciudad no cumple con el plazo de iniciación de las obras, el 3 de mayo, corre el riesgo de ser excluida del Mundial. Nuestro plan de contingencias es eliminar a quien no cumpla ese plazo», agregó Silva.
El ministro explicó que la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA) exige un mínimo ocho sedes, mientras que Brasil quiere hacer el Mundial en doce ciudades.
«La decisión de hacer el Mundial en doce ciudades fue del presidente (Luiz Inácio Lula da Silva), para que todas las regiones de Brasil pudiesen recibir partidos, pero la FIFA sólo necesita de ocho ciudades, por que son ocho los grupos de selecciones y nuestro plan de contingencias es eliminar a quien no cumpla el plazo», comentó.
Las doce sedes mundialistas escogidas por la FIFA son: Brasilia, Sao Paulo, Río de Janeiro, Salvador, Belo Horizonte, Porto Alegre, Curitiba, Manaos, Recife, Fortaleza, Natal y Cuiabá.
