El ministro brasileño de Deportes, Orlando Silva, pidió hoy a las autoridades municipales y regionales responsables por las construcciones necesarias para el Mundial de fútbol que el país organizará en 2014 que aceleren el ritmo de las obras.
«El Mundial será un éxito, pero es necesario apurar el paso. Tenemos que tener y cumplir un cronograma bien definido», afirmó Silva en una audiencia en una comisión del Senado.
El ministro advirtió que, mientras más demoren en concluir las obras, mayores serán los costos para las administraciones municipales y regionales.
«Estoy insistiendo en acelerar la preparación del Mundial porque el evento tiene fecha marcada para comenzar. Si no adelantamos el servicio ahora, tendremos que aumentar las inversiones para acabar las obras cuando tengamos menos tiempo», dijo.
Silva dijo que en las últimas semanas ha viajado a varias de las ciudades que serán sede del Mundial de 2014 para discutir sobre el atraso en las obras necesarias para el evento, principalmente los estadios.
Agregó que este mismo miércoles se reunirá con el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, para entregarle un informe sobre el avance de las obras y que le sugerirá al jefe de Estado que convoque a alcaldes y gobernadores regionales a una reunión en mayo para pedirles prisa.
«Lo que yo puedo hacer es dialogar con las ciudades, con los estados, estimular a las ciudades a adoptar medidas lo más rápido posible», afirmó el ministro al aclarar que la construcción de los estadios no es responsabilidad del gobierno nacional.
Según el ministro, la construcción o la adaptación en el tiempo estipulado de los estadios fue uno de los compromisos que Brasil asumió ante la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA) cuando fue escogido para organizar el Mundial.
El cronograma de la FIFA prevé que las obras en los estadios se inicien antes del 3 de mayo de este año y algunas de las ciudades aún están discutiendo proyectos o buscando recursos.
Silva admitió que, en caso de que alguna ciudad no realice las obras en el tiempo estipulado, será posible discutir la posibilidad de reducir el número de sedes.
Brasil organizará un Mundial en doce sedes pese a que la recomendación de la FIFA es que la competición se celebre en un máximo de diez ciudades.
«El número de sedes es problema de la FIFA. Son doce ciudades porque Brasil entendió que era necesario a extender a todo el país la realización del Mundial. Pero es necesario que las ciudades y los estados cumplan sus compromisos», afirmó.
