La forma en que los equipos de José Mourinho desactivan a Lionel Messi, como ocurrió en el Barcelona-Inter de las semifinales de la Champions, ha comenzado a preocupar a la prensa deportiva de Argentina con vistas al Mundial.
«El portugués Mourinho encontró la manera de desactivar a la Pulga (Lionel Messi), una señal de alarma para (Diego) Maradona y la selección argentina, a menos de dos meses del Mundial de Sudáfrica», anuncia en su página web el matutino La Nación, de Buenos Aires.
El entrenador del conjunto milanés «lo hizo sumergirse en un laberinto indescifrable», afirma el rotativo, al destacar que «el mérito de Mourinho resurge».
«En los siete partidos que el portugués debió enfrentarse a Messi, el argentino no logró marcar ningún gol. Esta vez, cuando Messi la tuvo, siempre se vio rodeado. No encontró los caminos para desnivelar y sólo encontró posibilidades cuando un remate suyo fue parado por Julio César en el primer tiempo», comenta.
«En la segunda parte, Messi le dio una pelota de gol a Bojan, que desaprovechó la posibilidad. El rosarino jugó atado y no pudo salir del laberinto», concluye.
«Se puede decir que el Inter no pasó la mitad del campo en el segundo tiempo», afirma el diario deportivo Olé y se pregunta cuántos equipos «pueden darse el lujo de controlar al equipo de Messi con un futbolista menos».
«Y cuando más intentaba (en ataque) el conjunto Culé, menos podía crear por el gran esquema defensivo de Mourinho. Y a pesar de ser once contra diez, parecía ser el Inter el que tenía superioridad numérica», añade.
«Messi volvió a verse envuelto en la telaraña defensiva del Inter, que tuvo puntos altísimos en los argentinos Walter Samuel, Esteban Cambiasso y Javier Zanetti», mantiene el periódico.
