El Grupo Popular Europeo (PPE), mayoritario en la Eurocámara, celebró la publicación de los resultados de los test de estrés a los que se han sometido 91 entidades financieras europeas pero reclamó mantener las exigencias a los bancos relativas a los fondos propios, según declaró el portavoz económico del Grupo, el francés Jean-Paul Gauzès.
«A la luz de los resultados publicados este viernes, constatamos que la mayoría de los bancos europeos son sólidos. No obstante, estos buenos resultados no deben llevarnos a olvidar la aplicación de normas sobre la exigencia de fondos propios», señaló el eurodiputado.
Asimismo, garantizó que su grupo parlamentario vigilará la adopción de las legislaciones en curso manteniendo como prioridad conciliar la exigencia de solidez a los bancos, imponiéndoles ratios razonables de fondos propios, con las necesidades de financiación de la economía real.
Por su parte, el líder del Grupo Liberal, el belga Guy Verhofstadt, consideró que el ejercicio lllevado a cabo este viernes es un paso «vital» para devolver la seguridad a los mercados acerca de la salud y la sostenibilidad de del sector financiero europeo.
A su modo de ver, las pruebas de solvencia deben sentar las bases para realizar planes de inversión «sólidos» en los próximos años que puedan sacar de la recesión a los países miembros de la UE, como pasó en Estados Unidos y Suecia a finales de los ochenta y principios de los noventa o en Japón en el año 2002.
«Si se ve que los test han sido rigurosos y transparentes, los bancos deben confiar entre sí y prestarse sin estar bajo sospecha, para que las empresas puedan invertir de nuevo accediendo a préstamos aceptables y que la economía real se beneficie en último término del crecimiento y el empleo», destacó.
