El Espanyol se ha impuesto al Sevilla en los penaltis en la segunda semifinal de la LVI edición del prestigioso Trofeo Ramón de Carranza y se medirá este domingo en la final (22.00 horas) al Atlético de Madrid, que hizo lo propio este viernes ante el Cádiz.
El equipo de Mauricio Pochettino gozó de menos ocasiones que el cuadro hispalense, pero supo contener las acometidas andaluzas para llegar al término de los 90 minutos con empate (1-1). Y eso que Negredo marró un penalti en los instantes finales que pudo haber cambiado el encuentro por completo.
Antes, se adelantaron los espanyolistas con un tanto de Javi López, que llevó al fondo de las mallas un buen pase de Luis García tras un robo en campo del Sevilla. Sin embargo, el 1-0 (min.41) no inquietó a los pupilos de Antonio Alvarez, que igualaron antes de alcanzar el descanso.
Los sevillistas marcaron desde los once metros. Una internada de Perotti por el costado izquierdo fue señalada como pena máxima por Ayza Gámez y Kanouté, fiel a su tranquilidad, lo transformó con una ‘pseudo paradinha’ que no pudo atajar Kameni.
Y tras la igualada en el minuto 90 llegó la lotería de los penaltis. Ahí, los barceloneses estuvieron más certeros y los errores de Romaric, primero, y Perotti, después, condenaron al Sevilla a no poder revalidar un trofeo que había ganado en las dos últimas ediciones.