El Bayern Múnich ha entrado en línea de confrontación directa con la Federación Francesa de Fútbol (FFF) y anunciado que se negará a autorizar la comparecencia de Frank Ribéry ante la comisión disciplinaria como presunto implicado en la huelga de esa selección durante el Mundial de Sudáfrica.
«No puede ser que la Federación Francesa lo requiera arbitrariamente frente a sus obligaciones con el Bayern», indicó hoy el presidente del club bávaro, Karl-Heinz Rummenigge.
El mandamás del Bayern argumenta que la cita con la comisión disciplinaria, prevista para el 17 de agosto, tres días antes del inicio de la Bundesliga, no tiene nada que ver «con el calendario futbolístico francés».
El club bávaro ha expresado repetidamente su total respaldo a su jugador, al que considera víctima de intereses políticos, tal como argumentó el propio Rummenigge respecto a las imputaciones contra Ribéry de haber mantenido relaciones sexuales con una prostituta siendo ésta menor.
El jugador del Bayern, así como sus compañeros de selección Nicolas Anelka, Eric Abidal, Patrice Evra y Jérémy Toulalan han sido citados a declarar por su presunta implicación en la huelga de los «bleus» en Sudáfrica.
No es la única medida que han tomado los dirigentes del equipo nacional francés, ya que el nuevo seleccionador, Laurent Blanc, ha dejado fuera de la convocatoria para el partido amistoso del próximo miércoles ante Noruega a los 23 futbolistas que formaron parte de la expedición en Sudáfrica.
