El Atlético Mineiro brasileño se quedó a la deriva, amenazado por el descenso a pocas semanas del cruce de octavos de final de la Copa Sudamericana contra el Independiente Santa Fe colombiano, tras el despido del ex seleccionador Vanderlei Luxemburgo.
El técnico que dirigió al Real Madrid y a la selección Canarinha cosechó uno de sus fracasos más sonados en los últimos años, ya que no consiguió hacer funcionar en todo el año al equipo de Belo Horizonte, que la temporada pasada luchó por el título de Liga y a punto estuvo de clasificarse a la Copa Libertadores.
Después de muchas semanas de conjeturas, la directiva del club optó por destituir a Luxemburgo, considerado como uno de los mejores y más laureados técnicos del país, ya convencida de que su permanencia era contraproducente.
La gota que colmó la paciencia del presidente Alexandre Kalil fue el auténtico varapalo sufrido la noche del jueves en su visita al Fluminense para jugar un partido de la vigésima quinta jornada de la Liga.
El equipo carioca humilló al Atlético Mineiro con un abultado 5-1 que lo dejó con 21 puntos, tercero por la cola, en puestos de descenso.
Este resultado solo fue el colofón a una temporada decepcionante, en la que el equipo ha cosechado seis victorias, tres empates y quince derrotas.
Los flojos resultados en la Liga contrastan con las expectativas que tenía el club, que creía que este año iba a volver a ocupar los puestos de cabeza, sobre todo después de haber ganado con relativa facilidad el campeonato regional de Minas Gerais al comienzo del año y por haber mantenido al goleador Diego Tardelli.
Uno de los factores que, sin lugar a dudas, han afectado a los malos resultados del equipo fue el cierre del estadio ‘Mineirão’ para las obras de cara al Mundial del 2014.
Esto obligó al equipo a jugar sus partidos de casa lejos de la ciudad de Belo Horizonte, en localidades como Ipatinga o Sete Lagoas, donde no ha conseguido construir un fortín.
El equipo todavía no ha anunciado al sustituto en el banquillo, que tendrá la difícil tarea de sacar del pozo a este equipo grande y conseguir que haga un buen papel en la Copa Sudamericana, que podría ser su tabla de salvación de la temporada.
El Atlético ganó un boleto para los octavos de final después de deshacerse del Prudente brasileño en la segunda fase y ahora jugará contra el Independiente Santa Fe, líder de la Liga colombiana, que superó al Caracas en la fase anterior.
Para ‘Luxa’, como es apodado de forma cariñosa en Brasil, el despido es un jarro de agua fría, porque es una nueva mancha en su currículo, hasta ahora el mejor en la Liga, que ya ha ganado cinco veces con cuatro equipos diferentes.
Él estaba confiado en que podría enderezar el rumbo y aseguró que no dejaría al equipo como le pedían los aficionados en las gradas desde que sufrió los primeros traspiés en el campeonato.
Con la destitución de Luxemburgo, asciende a 23 el número de entrenadores que han perdido su empleo desde el comienzo de la Liga en mayo.
Tan solo tres equipos han mantenido hasta ahora a sus técnicos: el Botafogo (Joel Santana), el Fluminense (Muricy Ramalho) y el Guaraní (Vagner Mancini).
