El entrenador del Sevilla, Gregorio Manzano, aseguró que su equipo jugó «mejor en la primera parte mejor contra once que contra diez», ya que tras la expulsión del valencianista Mehmet Topa a su equipo le entró «un poco de ansiedad y prisas», lo que no impidió que los tres puntos se quedaran en el Sánchez Pizujuán
«Hemos jugado en la primera parte mejor contra once que contra diez, tratando bien el balón y triangulaciones pero nos entró un poco de ansiedad y prisas. La superioridad que teníamos en el campo no se manifestaba», señaló Manzano.
«Luego salió Alvaro Negredo y nada más entrar hizo el gol y eso permitió que el partid fuera más fácil, aunque nunca fue fácil porque el Valencia se repliega muy bien, hace contragolpes y, al final, hicimos un partido muy bueno, comprometido. El equipo sigue firme en casa, sacando puntos y mirando hacia arriba en la tabla», admitió.
Los goles del Sevilla llegaron por medio de Negredo y Alfaro, dos jugadores salidos del banquillo, y Manzano reivindicó la importancia de que «todos los jugadores estén bien para cualquier momento». «Me alegro de que los jugadores sigan en esa línea y por tanto estoy doblemente feliz», señaló el técnico, que alabó a Martín Cáceres y desveló que en la Copa del Rey «volverán a jugar jugadores de refresco».
