El presidente de la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS), Javier Lozano, ha confesado que su «primer equipo siempre» será la selección nacional con la que conquistó el título mundial en 2000 en Guatemala, del que están a punto de cumplirse diez años y cuyas anécdotas y vivencias han sido detalladas por sus protagonistas en el libro ‘El origen de las estrellas’.
La obra, editada por ‘SM’ y con el prólogo del ex internacional Julio García Mera, narra como vivieron aquella cita los componentes del combinado nacional que logró derrotar a Brasil el 3 de diciembre de 2000 y proclamarse por primera vez en su historia campeón del mundo.
El escenario de la presentación del libro fue el Museo de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), y en él estuvieron, además de Lozano y su cuerpo técnico, varios de los internacionales que estuvieron en aquella cita como Jesús Clavería, el capitán entonces, Luis Amado, Guillermo Martín, Javi Sánchez, Santi Herrero, Joan Linares, Javi Rodríguez, autor de los dos ‘dobles penaltis’ que provocaron la remontada y la corona, Javier Orol, Julio García y Alberto Riquer.
Tras la proyección de un video con las imágenes de la final, Jesús Clavería, con el trofeo conquistado, dio las gracias «al ideólogo» (Lozano) que les ha permitido volver a verse «diez años después». «Fui el portador de un brazalete dentro de un grupo de amigos y así volvimos de Guatemala», advirtió.
«Ser campeón del mundo es un privilegio al alcance de muy pocos y el secreto fue la unión. Todavía cuando nos cruzamos en una cancha nos miramos de forma especial. Como dice un clásico del cine, ‘Siempre nos quedará Guatemala'», añadió.
«ES UNA HISTORIA REAL, CON SUS MISERIAS Y GRANDEZAS».
Por su parte, Javier Lozano, presidente de la LNFS y el ‘arquitecto’ de los éxitos del fútbol sala nacional, subrayó que es ahora cuando valoran «con sensatez» aquella fecha, que significó «un punto de inflexión» hacia un futuro que deben «cuidar».
«El libro nace porque llegué a la conclusión de que el fútbol, por el que siento admiración, valora la grandeza de sus antepasados, y nuestro deporte parece que intenta borrar su pasado y eso es inmadurez. Era necesario para dar constancia de las cosas no vienen caídas del cielo y que hubo un antes y un después, y éste es el primer paso», prosiguió el ex seleccionador.
Este recalcó que la obra narra «una historia real, con sus miserias y sus grandezas» y que es una «lección de vida» en la que todos perseguían «un sueño». «Aquello fue la constatación de una manera diferente de comportarse, de una nueva mentalidad. El primer amor nunca se olvida, por eso mi primer equipo de siempre será el de Guatemala», sentenció.
Además, también intervino en el acto, Antonio Escribano, presidente del Comité Nacional de Fútbol Sala de la RFEF, opinó que este libro es «la semilla de lo que hoy es el fútbol sala», mientras que Pedro Sánchez, gerente de Ediciones Especiales ‘SM’, apuntó que la razón de apostar por esta obra es porque «es una publicación educativa», que reúne «un conjunto de recuerdos, de sensaciones y de ejemplos de superación».
