La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha recordado este martes que hace cuatro años dijo que si para ayudar al presidente del PP, Mariano Rajoy, a ganar las elecciones al Gobierno central había que ir en su lista, ella estaba disponible, una disponibilidad que ha vuelto a mostrar ahora, aunque ha destacado que también puede echarle una mano desde el Ejecutivo madrileño.
«Hace cuatro años dije que si para ayudar a Rajoy a ganar hay que ir en su lista, yo estoy disponible y lo vuelvo a decir exactamente igual ahora. Lo que pasa es que yo siempre pensé que desde donde estamos también le podemos ayudar a ganar», ha afirmado en declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press.
Aguirre ha considerado que el presidente de su partido no le va a ofrecer ni a ella ni a ninguno de sus homólogos regionales una cartera ministerial en el caso de que se convierta en jefe del Ejecutivo, ya que van a «contraer un compromiso en el mes de mayo para los próximos cuatro años con los ciudadanos» si es que ganan las elecciones autonómicas. «Si es que perdemos, pues seremos unos perdedores y a lo mejor tampoco nos lo ofrecerá», ha dicho entre risas.
Al ser preguntada por si estas mismas carteras se le podrían ofrecer a algún alcalde, la presidenta madrileña ha afirmado que en el caso de los primeros ediles es distinto, aunque ha matizado que ellos también adquieren un compromiso tras los comicios.
En este punto, ha recordado que el ex presidente del Gobierno José María Aznar, cuando formó Gobierno, le ofreció un Ministerio a la que entonces era alcaldesa de Málaga, pero cuando ésta atravesaba el final de su legislatura en el Consistorio.
Sobre el caso concreto de que esto le ocurra al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, la dirigente regional ha señalado que no sabe que podría pasar porque el primer edil no ha sido ministro. «Yo ya lo he sido. He estado en política municipal, el periodo más largo de mi vida política, en la política nacional, en las cámaras legislativas y ahora en la Comunidad de Madrid», ha rememorado.
También ha destacado que Rajoy es una persona «muy sensata», por lo que duda «mucho» que la coloque a ella o cualquier presidente autonómico que haya ganado las elecciones en un Ministerio.
A la pregunta de si ve a Ana Botella de alcaldesa de Madrid, Aguirre ha aseverado que el presidente del partido ha dicho «con toda claridad» que el candidato a la Alcaldía iba a ser Alberto Ruiz-Gallardón.
Ante la posibilidad de que este abandone el cargo en el supuesto de que Rajoy llegase a La Moncloa, la presidenta madrileña ha destacado que ha escuchado al primer edil decir que él «siempre» ha cumplido sus compromisos con sus electores. «Es la pura verdad. Cuando ha ganado y cuando ha perdido», ha explicado.
EL TRIUNFALISMO, «EL PEOR ENEMIGO»
Dos días después de que el PP clausurara la Convención nacional que organizó este fin de semana, la jefa del Ejecutivo autonómico ha asegurado que viajó a Sevilla para apoyar «con entusiasmo y con ilusión» lo que cree que es «la solución para España».
Ante las voces que apuntan a que el PP celebró en esa cita los buenos resultados que arrojan las encuestas, Aguirre ha indicado, como ha hecho en sus mítines en Madrid, que el triunfalismo es el «peor enemigo» del partido.
Además, ha precisado que «lo importante» en estos momentos es que el «paradigma socialista ha quedado absolutamente desmitificado desde que la crisis económica ha hecho ver que las políticas socialistas son un fracaso, no sólo en España, donde todas las encuestas dicen que en Gobierno de Zapatero no confía nadie, sino en toda Europa».
Por otra parte, ha negado que en los últimos años se haya escondido al ex presidente del Gobierno José María Aznar de los actos de partido. «Es verdad que a lo mejor en algunas otras citas no se le ha dado el papel tan importante que se le ha dado en ésta, que ha sido abrir la convención. Hizo un gran discurso», ha afirmado.
Sobre los comentarios que surgieron ante su ausencia en la clausura de la convención, la dirigente madrileña ha recordado que estuvo en Sevilla «con todos sus compañeros presidentes autonómicos y presidentes de partido». «Porque no estuve en una sesión el domingo por la mañana, escándalo. Otros compañeros míos, también presidentes autonómicos, no estuvieron en la sesión de la mañana ni en la comida del día anterior con Rajoy y nadie dijo nada», ha puesto de relieve.
«Comprendo que a los socialistas no les guste que estemos todos unidos y quieran decir que yo he roto la unidad. Yo no he roto ninguna unidad del PP. Ahí estaba apoyando con entusiasmo y con ilusión lo que creo que es la solución para España», ha concluido.