El argentino Claudio Borghi dijo hoy que quiere seguir al frente de la selección de Chile el trabajo de su compatriota Marcelo Bielsa, que lo antecedió en el cargo.
«Nosotros nos sentimos capaces, conocedores del medio, de gran parte de los jugadores. Veremos si podemos aprovechar la posición que nos dejó (Bielsa) en el mundo del fútbol», afirmó el ‘Bichi’ Borghi al ser presentado oficialmente como nuevo seleccionador de Chile.
El campeón mundial con Argentina en México’86 elogió el trabajo desarrollado por el rosarino en la Roja, y destacó que sus resultados «han sido muy buenos, clasificó al Mundial (Sudáfrica 2010) de buena manera y se hizo un Mundial muy lindo».
«Queremos seguir el trabajo de Bielsa y que la gente se siga sintiendo orgullosa y ver a la Roja representada de buena forma», agregó, aunque matizó: «Siempre tiene que venir otro y nos sentimos capaces, conocedores del medio y gran parte de los jugadores».
Borghi llegó al cargo con un contrato hasta el término de la fase de clasificación del Mundial de Brasil 2014, prorrogable automáticamente si Chile se clasifica, con honorarios de 1,5 millones de dólares anuales.
El nuevo técnico de la Roja lleva veinte años en Chile, donde finalizó su carrera de jugador y se formó como entrenador, debutando como tal en el Audax Italiano.
Con el Colo Colo ganó después cuatro títulos consecutivos (Apertura y Clausura de 2006 y 2007) y tras desvincularse de los albos fue a trabajar a su país natal, donde dirigió al Independiente, Argentinos Juniors, con el que ganó el Clausura 2010, y al Boca Juniors, del que se desvinculó a comienzos de este año.
Sobre esta última experiencia, dijo: «No fue todo lo buena que nosotros queríamos. Pero fue como hacer un Máster en Estados Unidos, porque Boca es un club espectacular y lamentablemente no pudimos cumplir con las expectativas».
En Chile, Borghi goza del aprecio de la hinchada y su llegada a la selección, tras la renuncia de Bielsa, que no aceptó, por cuestión de principios, trabajar con un nuevo equipo directivo del fútbol chileno, se ha visto casi como una sucesión natural y lógica.
«El respeto de la gente es sorprendente a pesar de los dos años entrenando afuera», comentó el ‘Bichi’ respecto del aprecio de la gente.
«Me siento un tipo de pueblo, no he cambiado mi forma de vida. Tengo el teléfono de todos los jugadores, pero no he querido hablar con nadie, no quiero influir en sus declaraciones. A partir de hoy me pondré en contacto con todos para ver su disposición y presentarme para los que no me conocen en forma personal», dijo, tras señalar que ha comenzado a trabajar hoy mismo en su nuevo cargo.
El primer compromiso de Borghi es formar una plantilla para jugar un amistoso con Portugal, en el país europeo, el próximo 26 de marzo y eventualmente otro con Dinamarca el día 29 del mismo mes, en el marco de la preparación del equipo para la próxima Copa América.
Aunque subrayó que el equipo base está prácticamente listo (dirigió en el Colo Colo a varios internacionales chilenos), no descartó la búsqueda de algunas caras nuevas y anunció que hablará con el centrocampista del Roma Italiano David Pizarro, que se alejó de la ‘Roja’ hace algunos años.
«Tengo ventajas con él, fuimos compañeros en la última etapa de mi carrera. Voy a hablar con David y muchos otros que están en diferentes partes del mundo y ver su disposición a jugar por la Selección», dijo.
«Nunca tuve dudas de asumir (en la selección), dijo Borghi, que admitió que para él será una experiencia nueva en una carrera «muy rápida, donde estamos en un sistema diferente al día a día (…), es una experiencia nueva y queremos aprender y adaptarnos al sistema de trabajo de una selección».
«Promesas no hago, lo que si espero es ser digno de dirigir la selección nacional, de que todos se sientan muy orgullosos del equipo», concluyó el nuevo seleccionador chileno.
