El entrenador del Real Madrid Jose Mourinho ha asegurado que «no pasará nada» si su equipo sucumbe ante el FC Barcelona en todas las competiciones, al tiempo que ha mostrado su impresión de que no existe dopaje en el fútbol y ha reiterado su deseo de pasar «muchos años» en el equipo blanco antes de regresar a Inglaterra.
«Mo pasaría nada si el Real Madrid perdiera contra el Barça en las tres competiciones. Para quien trabaja bien como nosotros sería injusto. Lo difícil es llegar a abril y tener opciones en las tres competiciones. Eso lo tenemos nosotros, el Barça, el Manchester, el Inter y nadie mas. Significa que estamos haciendo muy bien las cosas. Los detalles son los que van a decidir todo», señaló Mourinho en una entrevista en ‘Veo7’ recogidas por Europa Press.
El entrenador, que no está «ni de acuerdo ni en desacuerdo» con la posible huelga en el fútbol español, aseguró que se encuentra «muy a gusto» con Florentino Pérez, que es su «amigo igual que Moratti o Abramovich», sus anteriores presidentes.
«Si fracasara en el Real Madrid también podría ser feliz, seguro. Hay entrenadores que son felices y fracasan en todos los clubes», explicó Mourinho, que en cualquier caso solo piensa en continuar «muchos años» en el club blanco antes de «volver a Inglaterra», donde «más» ha «disfrutado», y de cerrar su carrera «entrenando a la selección portuguesa».
Valorando la temporada, el luso prefirió no comentar el 5-0 contra el Barcelona porque prefiere quedarse con lo bueno. «Sigue siendo uno de los momentos más bonitos de mi vida ganar la semifinal de ‘Champions’ con el Inter en Barcelona. Me quedo mucho más con los momentos positivos que con los negativos, alimentan mi motivación y mi alegría de continuar», explicó.
EN EL FUTBOL SOLO HAY «CASOS AISLADOS» DE DOPAJE.
El luso repasó todos los temas de actualidad, entre ellos el dopaje, y se mostró convencido de que «prácticamente no existe» en el fútbol y que se reduce a «dos o tres jugadores al año» que constituyen «casos aislados».
El técnico tampoco dudó de la «honestidad» de los árbitros. «Son hombres y a veces me defraudan, pero no hay una mano negra contra el Real Madrid ni contra nadie. A veces se crea la sensación de que hay un equipo perfecto con mucho ‘fair play’, que juega muy técnico, pero en situaciones iguales no hay una tarjeta o un penalti», dijo en referencia velada al Barcelona. «Pero nunca dudo de los árbitros», abundó.
Continuando con el eterno rival, Mourinho alabó a Guardiola, «uno de los mejores entrenadores» del mundo cuya «juventud» le permite margen «para crecer y mejorar». «Si pudiese pedir algo de Pep sería la prensa local que está completamente detrás de su trabajo, mientras que yo en Madrid no tengo prensa detrás del Real Madrid», opinó.
Además, Mourinho, que «estaría loco» si no quisiera a Messi en su equipo, algo que ni se plantea porque es «una misión absolutamente imposible», reveló que no le gusta que la hinchada grite su nombre en el Santiago Bernabéu. «Obviamente lo agradezco mucho, pero me gustaría que gritará el nombre de los jugadores. Son ellos los que necesitan su apoyo», relató.
