El presidente del CD Tenerife ha perdido definitivamente el norte. Anestesiado desde hace varias semanas, ahora su discurso se basa en insinuar que el equipo podría permanecer en Segunda A por otros aspectos que, evidentemente, no son los deportivos, a un paso del descenso a la Segunda B.
Miguel Concepción cree que podría llegar a darse el caso de que algún equipo descienda por impagos e incluso, aunque el CD Tenerife no sea decimonoveno, sino que esté más abajo, posiblemente pueda volver a salir en la categoría de plata. Este hombre, o bien es un visionario o directamente está más en el aire que su propia flota de aviones.