La Asamblea Ordinaria de Socios Compromisarios del Athletic Club, la primera que se celebra bajo la presidencia de Josu Urrutia, ha aprobado este lunes en el Palacio Euskalduna las cuentas de la anterior Junta Directiva, así como el presupuesto presentado por la actual, que incluye una subida de cuotas del 3 por ciento.
Los 746 compromisarios rojiblancos asistentes a la Asamblea dieron su respaldo a la formulación de las cuentas del pasado ejercicio, que se cerró con un déficit de 10 millones de euros, por un 487 votos a favor, 222 en contra, 26 en blanco y 11 nulos.
Asimismo, aprobaron el presupuesto presentado por el directiva de Josu Urrutia, cifrado en 61,1 millones de euros, con una amplia mayoría: 548 votos a favor, 178 en contra, 13 en blanco y 7 nulos. Los socios apoyaron de esta manera un incremento en el precio de las cuotas de los socios de un 3 por ciento (el dato del IPC de agosto).
El acto dio comienzo a las 19.30 horas, en primera convocatoria, con la presencia de 479 socios compromisarios. Tras el tradicional minuto de silencio en honor de los socios, jugadores y directivos fallecidos en el último año, Josu Urrutia dio comienzo a su discurso previo, en el que tras agradecer a los socios «su comportamiento y su apoyo en el periodo electoral» y solicitarles su «unión en una misma dirección», destacó «el compromiso» de su Junta por hacer un Athletic «mejor en lo deportivo y en lo económico».
Urrutia señaló que el presupuesto para el nuevo curso, de 61,1 millones, con una subida de cuotas del 3% es «un presupuesto absolutamente realista para lograr el equilibrio financiero y ser sólidos para responder a los compromisos», señaló.
El presidente rojiblanco destacó la apuesta de su equipo de gobierno por «apretarse el cinturón», reduciendo el gasto en un 8,6% (la mayor parte en personal deportivo) y aumentando los ingresos en un 7,6%.
Y pese al déficit de 10 millones de euros que presentan las cuentas del ejercicio anterior, el último del mandato de Fernando García Macua, Josu Urrutia declaró que la situación del club «preocupa», si bien «es mejor que la de la mayoría de clubes, en los que los ingresos sirven a los gastos y muchos están en procesos concursales».
En el ámbito deportivo, Josu Urrutia tuvo una mención extraordinaria hacia el ex técnico del Athletic Joaquín Caparrós, al que agradeció su trabajo durante los cuatro últimos años. Al tiempo, pidió paciencia con «el nuevo proyecto de Bielsa», que implica «un sistema de juego diferente», lo que «llevará tiempo», aunque «poco a poco ya se asienta», apostilló.
Tras el discurso de Urrutia, el peso de la Asamblea recayó en manos de sus dos principales colaboradores, el contador Alberto Uribe-Echevarría y el secretario Javier Aldazabal, quienes fueron los encargados de explicar a los socios los criterios contables por los que aducen que el último ejercicio económico se cerró con 10 millones de déficit y no con superávit como defendió el anterior equipo de gobierno presidido por Fernando García Macua.
La naturaleza de los ‘Socios Barria’, piedra angular de las diferencias contables que existen entre la actual Junta rojiblanca y la anterior, fue el tema estrella de la noche, sobre el que giraron una y otra vez las intervenciones de los directivos rojiblancos y de los socios intervinientes.
ZARATE: «LES HEMOS DEJADO UNA BUENA HERENCIA».
El socio que acaparó la atención principal fue Juan Antonio Zárate, responsable de las cuentas del Athletic en los últimos cuatro años, que quiso dejar claro, una vez más, que «no falta un euro en la caja, y no hay agujero», y que las discrepancias son «exclusivamente de carácter técnico-contable».
Zárate defendió en una larga intervención la gestión que durante cuatro años realizó la Junta presidida por García Macua y aseveró que el futuro del Athletic «es esperanzador, en parte por la gestión de esa junta saliente», poniendo énfasis en la presencia del Athletic en Europa, «que va a reportar al club 5 millones de euros», y el nuevo contrato televisivo, que permitirá al club ingresar «14 millones de euros». «Sinceramente, creo que les hemos dejado una buena herencia. Hemos dejado buenas bases», resaltó Zárate.
El ex contador del Athletic explicó detalladamente las tres principales discrepancias contables (Socios Barria, prima del contrato de televisión e ingresos derivados de la Fundación Athletic), y consideró «injusto» que la nueva Junta haya formulado las cuentas.
No obstante, aseguró que su intención no es fomentar «el combate» porque «la unidad del club está por encima de todo», y deseó al equipo de gobierno de Josu Urrutia «los mayores éxitos, porque serán los de todos y los del Athletic», sentenció.
Por su parte, Uribe-Echevarría y Aldazabal rebatieron cada uno de los argumentos de Zárate y, entre otros datos, desvelaron que el 50% del traspaso de Aduriz al Mallorca y la cesión de De Cerio al Córdoba no serán cobrados.
Las afirmaciones más duras y contundentes fueron las del actual contador del club, que rechazó la afirmación sobre la buena herencia dejada por la anterior Junta. «Eso no es ni cierto ni justo», aseveró, al tiempo que consideró que «los criterios contables de la anterior directiva no son correctos, ni jurídica ni económicamente, y atentan contra los intereses del Athletic».
Tras las intervenciones de seis socios más, que volvieron sobre el tema de los Socios Barria, alertaron sobre la desunión y mostraron su preocupación sobre el déficit estructural que afecta al Athletic, se procedió, tres horas después del inicio de la Asamblea, a las votaciones, que se saldaron con un apoyo claro de los socios a la nueva Junta Directiva que salió de las urnas el pasado 7 de julio
