"Sabíamos que estábamos en la cuerda floja. El equipo ha sido un desastre, una vergüenza y entiendo que cuando un equipo no está funcionando el primer responsable es el entrenador"
El conjunto amarillo de Villarreal se encuentra en una encrucijada. Apeado de toda competición europea después de clasificar cuarto en el grupo A de la Champions, y con los mismos puntos que la zona de descenso en Liga, cae eliminado de la Copa del Rey y lo hace ante un equipo modesto de la Segunda división B española, el Mirandés.
El Madrigal vivió uno de sus peores momentos desde que el conjunto castellonense probó la primera división, y a última hora de la noche el club anunció la destitución del técnico Juan Carlos Garrido.
El ‘submarino amarillo’ encuentra a sus dos delanteros, estrellas de renombre mundial, el brasileño Nilmar y el italiano Rossi, en la enfermería con importantes lesiones, y el equipo había entrado en una dinámica peligrosa.
Sin Garrido al frente, un nuevo horizonte se abre para el Villarreal en 2012, con el único objetivo de salvar la categoría.
LA PRENSA, FRÍA CON EL VILLARREAL
Los profesionales de la comunicación no hicieron en sus relatos ni crónicas especial sangre hacia el conjunto amarillo ni hacia el técnico recién destituido, Garrido:
AS: «El Mirandés provoca la destitución de Garrido. El Mirandés da la campanada en la Copa del Rey y se clasificó para octavos de final gracias a un doblete de Pablo Infante».
El Mundo: «El Villarreal despide a Garrido. La derrota ante el Mirandés da la puntilla al técnico tras una temporada desastrosa en Liga y eliminado de la Champions».
GARRIDO: «HA SIDO UN DESASTRE, UNA VERGÜENZA»
El ya ex entrenador del Villarreal, Juan Carlos Garrido, pasó por los micrófonos de El Partido de las 12 de la Cadena COPE —AUDIO–:
«Sabíamos que estábamos en la cuerda floja. El equipo ha sido un desastre, una vergüenza y entiendo que cuando un equipo no está funcionando el primer responsable es el entrenador. Esta es una situación que se sabe que puede pasar y hay que afrontarlo con entereza y manteniendo el tipo. Hay muchas razones que explican esto, no sólo por el entrenador, y estamos en la circunstaancia que estamos porque todos lo hemos hecho mal. Las razones son porque hay una desilusión muy grande en la pretemporada, por la marcha de Cazorla, y el equipo no se ilusiona tanto y parece que estamos en crisis, después las lesiones muy importantes, y por último que no hemos acabado de conseguir volver al nivel».
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