"El técnico también estaba perfilando la osada idea de, cuando el Madrid estuviera arriba, contra oponentes más defensivos, hacer un juego parecido al Barça de pases rápidos. Intentar imitar al Barça"
El Real Madrid camina directo a la consecución de un título liguero cuatro años después. Desde que Josep Guardiola llegara a la dirección del banquillo del F.C. Barcelona e hiciera del conjunto catalán uno de los mejores combinados de la historia del fútbol, el Real Madrid, agazapado, no había tenido la oportunidad de hincarle el diente al coloso azulgrana.
El conjunto dirigido por José Mourinho no sabe aún lo que es ganar a su eterno rival en la era del portugués, pero con más rivales de por medio, en la presente temporada ha demostrado mayor resistencia, poderío y hambre.
La nueva cara que presenta el fútbol español no pasa desapercibida en Europa, donde Madrid y Barça se postulan como los dos grandes cocos del torneo continental, la Champions League. El cambio de turno, fin de ciclo o como se quiera llamar, se aprecia desde el viejo continente.
‘FOUR FOUR TWO’ IMPACTA EN ESPAÑA
La publicación de la revista mensual británica, Four Four Two (cuyo título hace referencia al sistema de juego futbolístico del 4-4-2), presenta en su último número de febrero de 2012 una apuesta por el cambio en el fútbol español. «Entra el Madrid, sale el Barça», tercia en su portada, con la propuesta de un reportaje que apunta con pelos y señales los pequeños detalles de esta transición en el balompié español:
«Ojo, Pep. Después unos años de dominio del Barça, los blancos te tienen en el punto de mira. ‘FFT’ revela cómo Mourinho ha subido el listón en su misión de tumbar al mejor equipo del mundo».
La revista en cuya edición digital no aparece el reportaje, fourfourtwo.com, presenta al técnico madridista como el auténtico artífice del éxito del conjunto blanco. Como un técnico muy valorado en Inglaterra, la revista habla de la propia idea de Mourinho consistente en que ‘sus segundos años son mejores’:
«Los fieles seguidores de Mourinho están convencidos de que el técnico se siente ahora como el verdadero conductor de la nave (el jefe) porque ha escondido las garras. No entra en peleas dialécticas con el Barcelona, felicitó a Guardiola por ser elegido mejor entrenador del año para la FIFA e hizo las paces con Preciado después de una intensa guerra con él, una señal inequívoca de que el equipo niega ahora los erráticos arrebatos y la manipulación de los medios».
El periodista firmante de la información es Graham Hunter, quien asegura que, más allá de los vaivenes que la propia competición ha ofrecido y contando siempre con el punto de inflexión del partido copero en el Bernabéu (derrota blanca por 1-2), la verdadera remontada se forjó antes de comenzar la temporada:
«En verano Mourinho decidió cambiar la filosofía de juego, no sólo con la intención de explotar las pocas carencias del Barcelona, sino para facilitar la reconquista de Europa. Mourinho siempre había estado obsesionado con las transiciones, pero contra equipos que presionaban muy arriba en el campo. Ahí el Madrid juega un fútbol de extremo contraataque, recuperando en cualquier lugar del campo y llegando con pocos toques. Pero el técnico también estaba perfilando la osada idea de, cuando el Madrid estuviera arriba, contra oponentes más defensivos, hacer un juego parecido al Barça de pases rápidos. Intentar imitar al Barça. Dedujo que Cristiano, Benzema, Xabi, Özil y Di María tienen la técnica y la velocidad de pensamiento para alternar entre esos dos estilos. Y estaba en lo cierto».
¿Quieres estar al tanto de las mejores publicaciones deportivas europeas? Síguenos en Twitter @24por7com