El traumático cierre de Don Balón ha dejado un reguero de 'muertos' que todavía no han recibido su merecido funeral
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La mítica revista Don Balón cerraba en el mes de septiembre de 2011 su edición de papel por una decisión unilateral del dueño de la misma. Rogelio Rengel Ros, hijo del propietario y, director de ediciones internacionales de la revista, así lo confirmaba a través de un comunicado–La veterana revista Don Balón anuncia su cierre–.
Meses más tarde, y prácticamente de la noche a la mañana, veía la luz Revista Don Balón, una página web con el mismo nombre que la revista pero que ya no pertenecía a las mismas manos.
Un grupo de periodistas encabezado por el periodista Jorge López Pedrol quería que siguiera existiendo el espíritu de este medio con el que han crecido muchas generaciones de periodistas deportivos.
Sin hacer ruido, tenía lugar el resurgir silencioso de la revista deportiva española por antonomasia. Con el mismo corazón y alma pero con diferentes dueños y en soporte digital.
Pero esta aventura periodística que ya aleteaba no alzará finalmente el vuelo. Periodista Digital ha podido saber, en exclusiva, que el nuevo proyecto echará el cierre en las próxima horas.
Y es que difícilmente puede salir adelante un proyecto que carga con varios cadáveres a sus espaldas. Fuentes consultadas por Periodista Digital han asegurado que todavía quedan asuntos pendientes entre el fundador del Don Balón de papel, Rogelio Rengel Mercadé, la antigua plantilla a la que se le adeuda algunas nóminas, los nuevos impulsores del proyecto online y, tan lejos tan cerca, la familia de Luis Del Olmo, que mantenía estrecha relación de 30 años con Rogelio Rengel Mercadé hasta que todo terminó como el rosario de la aurora.
LA GUERRA RENGEL VS. DEL OLMO
Los antecedentes a este conflicto son los siguientes: Luis del Olmo, según informó el suplemento ‘La Otra Crónica’ de El Mundo el 19 de noviembre de 2011, había interpuesto una denuncia penal contra Rogelio Rengel Mercadé por presunta administración fraudulenta de sus empresas cuando la familia se percató de que Rengel había hecho movimientos contables y transferencias irregulares entre las empresas de Del Olmo y las suyas.
Según esta información, Rengel, de 69 años, era el hombre de confianza del veterano locutor, y su administrador desde hacía mucho tiempo. Además, había fundado la revista Don Balón en 1975, hasta que en septiembre de 2011 se anunciaba el cierre a través de un comunicado tras la detención del fundador de dicha publicación por desvío de dinero, lo que paralizó la continuidad de la misma.
Su hijo, Rogelio Rengel Ros, formaba parte de la plantilla, y por aquel entonces se consideró él mismo «como una victima más» de las irregularidades de su padre.
MISMO NOMBRE PERO EN DISTINTAS MANOS
La nueva dirección de Revista Don Balón quiso desmarcarse desde el principio de todo lo que huela a la familia Rengel. Pero sus intentos fueron vanos.
El traumático cierre de Don Balón ha dejado un reguero de ‘muertos’ que todavía no han recibido su merecido funeral y han hecho inviable un proyecto online alimentado por ilusión pero también por viejos odios tribales que hasta no hayan sido enterrados debidamente no permitirán que el balón vuelva a rodar.
Con la colaboración de Pedro Reparaz.