Nada más lanzar a portería, el 10 se dejó caer al suelo, entre grandes gestos de dolor
Las pruebas realizadas a Leo Messi confirmaron que el jugador sufre una contusión ósea en la cara externa de la rodilla izquierda.
La evolución clínica marcará su disponibilidad para el próximo partido, el domingo contra el Betis, según informaron los servicios médicos del Barcelona. Como explica Juanma Pérez-Noya en La Gaceta,
Messi encaraba la portería del Benfica por la izquierda del área lisboeta. Artur salió a evitar el gol y se lanzó al suelo, tocando el balón.
Al hacerlo, cayó con todo su peso sobre la rodilla izquierda del argentino.
Leo se rehizo y pudo acaba la jugada, disparando a puerta sin éxito, pues el meta encarnado atrapó el balón. Nada más lanzar a portería, el 10 se dejó caer al suelo, entre grandes gestos de dolor.
Las asistencias pronto entraron en el terreno de juego, mientras cundía el pánico entre el público del Camp Nou. Su estrella se retorcía en el suelo, algo muy raro en Messi, que no suele exagerar sus lesiones.
Tras ser retirado en camilla, directamente hacia los vestuarios, los médicos del club azulgrana comenzaron la exploración de su dolorida articulación.
Las primeras noticias son que, afortunadamente, la lesión no reviste gravedad.
«Contusión en la cara externa de la rodilla izquierda», ha sido el diagnóstico inicial de los doctores culés.
Aun así, Messi será sometido a una resonancia magnética para saber el alcance exacto de la lesión.