Ejemplo de chulería y soberbia es el que hace gala Manuel Moreno desde Sport este 27 de diciembre de 2012 en su columna de opinión ‘La independencia del Barça’. El autor se imagina el hipotético escenario de donde jugaría el Barcelona en caso de que Cataluña lograra la independencia para después responderse a él mismoq que ya que los culés son tan buenos y juegan tan bien al fútbol eso les daría venia para elegir la competición que mejor les viniera en gana. No descarta ni irse a Inglaterra:
Un Barça libre (sic) sería apetecible -deportiva y económica- también para la Premier o cualquier otra Liga. Que nadie sufra por el futuro blaugrana. Cuando se hacen las cosas bien siempre hay muchas opciones para elegir
Suponemos que estas últimas palabras de Moreno no tienen a Artur Mas como destinatario, más si cabe tras los resultados de su decisión unilateral de convocar elecciones anticipadas. Ni anticipadas. A mitad de legislatura. Pero sigamos hablando de fútbol, que a Moreno puede que la política no le interese. Veamos sus argumentos:
Conjeturas interesadas y alarmistas todas ellas porque nadie sabe lo que puede suceder -en el ámbito deportivo y en todos los demás- ante un proceso sin precedentes. Pero de las pocas cosas claras que hay una es la nueva situación del Barça. Las preguntas pueden ser muchas y más o menos mal intencionadas, pero la respuesta es única: en una Cataluña independiente el Barça jugaría donde le diera la gana. Así de sencillo
Vamos, que para qué existen Estatutos y Federaciones y demás organismos nacionales e internacionales en el fútbol pudiendo hacer lo que te de la gana. Dónde va a parar. La traca final (aunque está al inicio del artículo) es cuando Moreno, redactor jefe de la sección de baloncesto, usa el nombre de Pau Gasol para poner un ejemplo de deportista que se vería obligado «a elegir selección» tras la finalización del proceso independentista. Básicamente porque Gasol ha sido de los primeros en proclamar que él preferiría seguir jugando con España:
No es que nadie se imagine a Pau Gasol eligiendo selección para el próximo Eurobasket -ese sería el camino como ya sucedió con la aparición de nuevos paises en la disgregación de Yugoslavia- y tampoco han llegado las elucubraciones hasta los requisitos para participar, por ejemplo, en unos Juegos Olímpicos, pero sí se ha hablado largo y tendido del Barça, situando al primer club de Catalunya como uno de los grandes damnificados del nuevo orden a establecer.