Hubo mensajeros del presidente, Florentino Pérez, que le trasladaron esta indicación señalando una prioridad estratégica
Diego Torres vuelve a las andadas. Siguiendo su tónica habitual en los últimos tiempos, el de El País tiende a sacar la munición contra Florentino Pérez justo en la previa de alguno de los partidos más importantes de la temporada, como es el que el Real Madrid jugará este 29 de abril en el Allianz Arena.
Por otra parte, la idea de que Pérez sigue queriendo influir en las alineaciones de Ancelotti tampoco es nueva en el periodista argentino de Prisa–Diego Torres, erre que erre: «Ancelotti prefería a Jesé, pero Florentino le sugería la necesidad impostergable de amortizar la inversión por Bale promoviendo su lucimiento»–.
En la nota de este 29 de abril de 2014, asegura que el entrenador italiano preferiría reforzar el centro del campo para evitar las acometidas de los de Guardiola, aspecto que no comparten desde las altas esferas de club de Chamartín:
El italiano piensa que, con la excepción de Ramos y Pepe, entre los titulares habituales del Madrid no hay jugadores cualificados para defender con solvencia el típico juego físico alemán. En busca de soluciones, Ancelotti barajó la idea de formar un 4-4-2 con Di María, Alonso, Casemiro y Modric en el medio campo, con Benzema y Cristiano en ataque.
Este era su planteamiento ideal. Pero la teoría contrastó con la práctica. Fuentes del club aseguran que el técnico recibió órdenes de la directiva indicándole que Bale no podía volver a quedarse en el banquillo. Hubo mensajeros del presidente, Florentino Pérez, que le trasladaron esta indicación señalando una prioridad estratégica.
Bale no jugó el partido de ida contra el Bayern de Múnich. En esa ocasión, más que por decisión técnica, lo que ocurrió es que el galés venía arrastrando una gripe que le obligaron a no concentrarse con sus compañeros el día anterior al partido, aunque al final fue convocado. Ancelotti apostó por Isco para sustituirle y el resultado fue óptimo: victoria blanca con gol de Benzemá y la puerta merengue a cero.
Si en esta ocasión la teoría de Torres es cierta, el damnificado sería el malagueño, el mismo que hace algunos meses parecía jugar por indicaciones de Pérez según la sección de deportes de El País–Diego Torres asegura en El País que Ancelotti insiste en Isco porque Florentino Pérez «le considera un futbolista estratégico»–.
