Después de que la cantante se conviertiera en una de las musas de los aficionados al deporte tras su ardiente homenaje a Michael Jordan; ahora, la exniña Disney, sorprendió en su último concierto en Londres.
Rodeada de penes, Miley Cyrus dio rienda suelta a un espectáculo cuargado de sexo que deja poco lugar a la imaginación.