El entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, se ha mostrado resignado tras caer (2-3) este miércoles en el duelo de vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey ante el FC Barcelona, donde ha apuntado que todo acabó «en el primer tiempo», ya que en la segunda mitad, con el marcador en contra, saltaron al campo con uno menos por la expulsión de Gabi.
«Fue una Copa muy digna, dejar fuera al Madrid fue muy importante. Con el Barcelona lo hicimos bien hasta el primer tiempo, hasta que en el segundo el equipo jugó como vieron, sin riesgo de encajar ni aspiración de marcar como les ordené. El partido terminó en el primer tiempo», indicó en una escueta rueda de prensa tras ser eliminado del torneo del ‘k.o’. El argentino no aclaró su decisión de no pelear en la segunda mitad. «Soy el entrenador y decido lo que creo más oportuno para el futuro del club y del equipo. Siento orgullo por mis jugadores. Lo del primero tiempo fue extraordinario, rebeldía, entusiasmo por jugar un partido intenso que era difícil porque el campo tenía conejos y jugamos contra los mejores y lo hicieron muy bien a la contra», indicó haciendo referencia a las quejas de Luis Enrique por el estado del campo. Siguiendo con cierta ironía y con pocas ganas de hablar, el ‘Cholo’ siguió respondiendo a las preguntas de los periodistas. «Sinceramente valoro haber salido campeón en la cancha del Barcelona. Gabi le decía al árbitro que hubo penalti y expulsión (de Alba) y el colegiado entendió que había que amonestar a Gabi», apuntó al ser preguntado por la actuación de Gil Manzano. «El Barcelona está más intenso en su juego. La llegada de Luis Suárez potencia la plantilla, también las llegadas en portería hicieron crecer a un equipo que tiene a los mejores del mundo. Hicimos el partido que era más conveniente para nosotros», finalizó.
