El descaro de un aficionado durante el Málaga-Getafe no ha pasado desapercibido para la Comisión Antiviolencia.
El aficionado que fue sorprendido orinando en público durante el encuentro e hizo caso omiso de las indicaciones de un vigilante de seguridad, ha sido propuesto para abonar una multa de 1.500 euros. Además, se le podría prohibír durante tres meses el acceso a los recintos deportivos.