El conjunto blaugrana va a poner en el mercado al extremo canario ya que termina en 2016 contrato y ahora es cuando puede sacar algo de dinero.
Según informa el diario Sport, el Barcelona va a pedir 20 millones de euros para aceptar su salida y no los 150 de su cláusula de rescisión.
Novias no le faltan ya que el Liverpool, el Arsenal, el Bayern, la Juventus, el Valencia y el Atlético están interesados en el internacional español.