El técnico del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, ha asegurado que el triunfo en Riazor contra el Deportivo de la Coruña, que coincide precisamente con la derrota del Valencia en Camp Nou durante los partidos disputados en la trigésima segunda jornada de la Liga, no es un paso «definitivo» dado que la pelea por la tercera plaza está «muy apretada».
«No es un paso definitivo porque está muy apretado todo, porque todos nos jugamos juntos, hay muchos nervios, mucha ansiedad, mucha responsabilidad por llegar a los objetivos que los clubes quieren y necesitamos estar en ‘Champions’. Tenemos mucha responsabilidad y habrá que mantener el esfuerzo y la competencia porque quedan muchos partidos por jugarse», argumentó, en declaraciones recogidas por la web del Atlético de Madrid. El ‘Cholo’ ha diferenciado el partido en las dos mitades, en un primer tiempo donde el Atlético salió «muy fuerte» y logró imponerse en el juego y en el resultado. «En el segundo, lo normal. Un equipo necesitado como el Deportivo, con el apoyo de su gente y con el esfuerzo de encontrar un gol que le metiera en el partido, como así pasó. Obviamente, el resultado de 1-2 es corto y el equipo rival tuvo el entusiasmo de lograr una ocasión que no hubo pero sí tuvo sensación de peligro», señaló. Con la ‘Champions League’ en el horizonte, el preparador argentino no hizo rotaciones y alineó un centro del campo muy diferente al que acostumbra, con Tiago como único pivote y con Koke, Saúl y Arda Turan en la creación. «Entendía que el partido me pedía tener gente como Saúl, que tiene una buena llegada, como Arda, que tiene buen juego de pelota, como Raúl García, que tiene buena llegada de segunda línea, con Griezmann pivoteando como delantero que lo está haciendo muy bien», valoró. Para finalizar, explicó el motivo por el que el colegiado Fernández Borbalán lo expulsó al filo del descanso. «Protesté la amarilla que creía que era para Sidnei y el cuarto árbitro informó que la había pedido. Por eso me amonestó y finalmente me expulsó», concluyó.
