ZURICH (SUIZA), 15 (Reuters/EP)
El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, expresó este viernes su rechazo a la propuesta de ampliar el número de selecciones en un Mundial y dijo que le gustaría mantener la cifra de participantes en 32 si es reelegido al mando del organismo rector del fútbol mundial, además de proponer que el continente que albergue la cita tenga que esperar 12 años hasta albergar otra.
El dirigente suizo sugirió también la posibilidad de jugar más repescas intercontinentales para resolver la discusión acerca de cuántos cupos se debe otorgar a cada región, y planteó la idea de que un continente que albergue el Mundial deba esperar por lo menos 12 años antes de presentar de nuevo una candidatura. Blatter buscará un quinto periodo como presidente de la FIFA en los comicios del 29 de mayo y dos de sus tres rivales, el exfutbolista portugués Luis Figo y el presidente de la federación holandesa, Michael van Praag, quieren ampliar los equipos participantes en la Copa del Mundo a 48 y 40, respectivamente. «Yo digo que debemos permanecer con el sistema que hemos tenido, y el mejor sistema es el que tiene 32 equipos», aseguró Blatter a periodistas en la sede de la FIFA. «En primer lugar, nos hemos dado cuenta de que 32 equipos es el mejor sistema matemático, porque se puede jugar durante 28 o 30 días», añadió el suizo, favorito en las próximas elecciones. «En segundo lugar, los contratos que tenemos para los próximos Mundiales, todos se hicieron con 32 equipos», sostuvo. La FIFA celebrará una reunión de su comité ejecutivo un día después de las elecciones de presidente para decidir cómo distribuir los cupos del próximo Mundial. «No debiese haber una revolución, debiese haber sólo una discusión sobre eso y la haremos al día siguiente de las elecciones con el presidente que sea elegido», afirmó, además de asegurar que es «una buena idea» hacer más repescas internacionales, ya que dan «un poco más de incentivos». Blatter dijo también que quería volver a introducir un sistema de rotación entre los continentes para la celebración de los Mundiales, lo que de ponerse en práctica significaría que Europa, que acoge la Copa del Mundo de 2018 en Rusia, no podría presentar una candidatura nuevamente hasta 2030.
