El exfutbolista alemán Franz Beckenbauer, que encabezó el comité organizador de Mundial de Alemania 2006, ha reconocido que la transferencia de 6,7 millones de euros a la FIFA en 2005 fue un error, pero ha negado que se tratase de una compra de votos en favor de la candidatura de su país.
«Con el fin de obtener una subvención de la FIFA -para la organización del Mundial de 2006- se adelantó un dinero a propuesta de la Comisión de Finanzas de la FIFA que, vista a día de hoy, debería haber sido rechazada. Yo, como presidente del comité organizador, tengo la responsabilidad de este error», explicó en un breve comunicado enviado a los medios de comunicación.
Sin embargo, negó que la candidatura germana comprase votos. «No hubo votos comprados con el fin de obtener el visto bueno para el Mundial de 2006», dijo Beckenbauer, de 70 años.
La revista alemana Der Spiegel había denunciado un supuesto fondo para sobornos de 6,7 millones de euros que se habría utilizado para comprar votos para Alemania. El dinero habría sido proporcionado por el entonces director general de Adidas, Robert Louis-Dreyfus, dijo la revista.
La Federación Alemana de Fútbol (DFB) ha rechazado las acusaciones, pero ha dicho que estaba investigando un pago de la misma cantidad de la comisión organizadora a la FIFA en 2005. El presidente de la DFB, Wolfgang Niersbach, quien fue vicepresidente del comité organizador del Mundial 2006, reconoció la semana pasada que había preguntas sin respuesta que rodean a ese pago, diciendo que el dinero fue demandado por el Comité de Finanzas de la FIFA con el fin de pagar una subvención de 170 millones de euros para el presupuesto de la organización.
Der Spiegel afirma que la FIFA devolvió el préstamo a Louis-Dreyfus. Niersbach ha sido invitado a comparecer ante la comisión parlamentaria de Alemania de deportes el 4 de noviembre, pero aún tiene que decir si va a ir.
