El seleccionador francés, Didier Deschamps, ha asegurado que este martes en el amistoso en Wembley ante Inglaterra representarán a su «país» y sus «colores» «con más orgullo que nunca», después de que el pasado viernes París fuese víctima de varios atentados terroristas que acabaron con la vida de 129 personas, y ha afirmado que el duelo «no tendrá dimensión deportiva».
«Estamos aquí y vamos a estar en el terreno de juego para representar a nuestro país y nuestros colores, el azul, el blanco y el rojo, con más orgullo que nunca», declaró en la rueda de prensa previa al duelo frente a los ingleses. En este sentido, considera que el encuentro será su oportunidad de demostrar al mundo el orgullo de ser francés. «El partido de mañana no tendrá dimensión deportiva, sino mucho más. Estamos aquí para representar a nuestro país y demostrar el orgullo de ser franceses. Agradezco todas las expresiones de solidaridad. Estoy convencido de que el partido de mañana estará lleno de emociones», subrayó. Además, apeló a la responsabilidad «social» como equipo. «El deporte es una representación de la unión en la diversidad. En palabras de Lass Diarra en un emotivo mensaje -para anunciar la muerte de su prima en los atentados-, el deporte no tiene color ni religión. Eso siempre ha sido así y debe seguir siéndolo», manifestó. Deschamps afirmó también que tanto él como sus jugadores siguen todas las novedades sobre la tragedia. «No lo podemos olvidar, tuvimos dos días para asimilar esta inmensa tristeza. Hoy estamos aquí y nuestra energía debe centrarse en la preparación para este partido con dignidad», aseveró. Dos de sus jugadores, Lass Diarra, que perdió a su prima, y Antoine Griezmann, cuya hermana logró escapar ilesa de la Bataclan, permanecen en el equipo. «Tenemos dos jugadores que son los más afectados, pero de manera diferente. Para Antoine Griezmann, las circunstancias son felices. En su caso, es un alivio, una felicidad y un placer poder tener con él a su hermana, que estaba presente durante el concierto en la Bataclan», expresó. «Lass ha sufrido en sus carnes perder a una persona muy cercana; estaba dispuesto a quedarse con nosotros y lo a hecho, desea demostrar los valores de unidad y solidaridad. Su presencia aquí es tranquilizadora», prosiguió. Por otra parte, el preparador galo explicó cómo vivieron los acontecimientos. «Jugamos sin escuchar las explosiones y sin saber qué había pasado. En realidad, fui consciente al final del partido. Nos dimos cuenta, obviamente, de los desastres que se habían producido alrededor del estadio y en el centro de París», recordó. «La selección alemana fue puesta bajo la responsabilidad del Estado francés. Independientemente de los problemas de seguridad, nos quedamos con ellos. Hablé con Joachim Löw y responsables alemanes. Era importante para mí estar con ellos hasta que se tomase una decisión. Salimos tarde y llegamos por la noche en Clairefontaine tratando de comer y dormir», relató.