El entrenador del CF Reus Deportiu, Natxo González, ha asegurado este lunes en la previa del partido de ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey contra el Atlético de Madrid en Reus que van a agarrarse a sus posibilidades, por menores que sean, de sacar un buen resultado ante los ‘colchoneros’ y ha avisado de que lo intentarán hacer desde una hipotética superioridad moral y con la intención de aprovechar esta oportunidad de sentirse «de Primera».
«Puede pasar de todo, pero no pienso en la eliminatoria, en qué va a pasar o en soñar con la clasificación. Todo pasa por mañana y por equilibrar el juego, y entonces puede pasar cualquier cosa. La lógica dice que tienes menos posibilidades y vamos a agarrarnos a ellas, pero todo pasa por eso», manifestó en rueda de prensa. El Reus, líder del grupo III de la Segunda División B, quiere estar «a la altura» y ser competitivo. «Se trata de equilibrar el juego para que el rival no tenga un paseo. Esto me preocupa, lo demás no, porque me hace ilusión ver nuestro estadio lleno, ir al Calderón. Ya he vivido otra vez esta experiencia y uno se siente de Primera, y es justo para los que estamos picando piedra desde abajo», recalcó. «Es un premio que mis jugadores se han ganado el competir contra rivales del máximo nivel, cada uno querrá poner sus aptitudes contra estos rivales y hacerlo lo mejor posible», sentenció al respecto, si bien reconoció que son inferiores y que deben tener esto claro en sus cabezas para no confiarse y salir demasiado mal parados. Y es que cree que el Atlético juega a un nivel de intensidad al que no están acostumbrados. «Tienen jugadores de primerísimo nivel y uno de los mejores equipos de Europa. La única forma de preparar el partido es el aspecto emocional, que nos pueda motivar más el partido y jugando como locales con un campo lleno, que no es fácil, y luego está lo táctico; tratar de con nuestras armas buscar superioridades. Sobre todo tratar de que no sea un monólogo con balón para ellos», argumentó. «Nos centramos en el partido de mañana, no podemos pensar más allá ni en la diferencia de categoría. Es tratar de equilibrar el partido y a ver hasta dónde somos capaces de llegar. Ellos dominan muchos registros, tienen mucha intensidad, y para nosotros no va a ser un partido para disfrutarlo sino para padecerlo y sufrir en el campo. Es buen escenario para mostrar las cualidades que podamos tener», aseveró. Por otro lado, quiere que su equipo juegue como en la Segunda División B, donde todo va rodado hasta el momento con ese liderato recién logrado. «Este liderato lo que nos puede aportar es esa consistencia y madurez que estamos teniendo, ese poderío que estamos teniendo como locales. Son factores a nivel emocional a los que agarrarnos. Habrá que juntarnos bien y salir rápidos al ataque, y con intensidad defensiva», desgranó. «Los dos equipos somos defensivamente fuertes, pero nosotros no somos un equipo defensivo, siempre tratamos de tener la posesión. Intentamos disfrutar de esta profesión, y a partir de ahí hay que gestionar bien el aspecto defensivo. El Atlético sale muy fuerte cuando recupera, y muchos goles salen de esa recuperación», manifestó. Además, ya tiene experiencia, aunque no buena, en medirse a grandes equipos de la Liga BBVA en la Copa. «La anterior eliminatoria de Copa que jugué, contra el Barça, se podía convocar a 18 jugadores y ahora no sé por qué se convocan a 16, y tienes que dejar a algunos fuera de la convocatoria. Los jugadores que más atrás han quedado en minutos van a competir, y entre el resto a decidir», lamentó en cuanto al hecho de tener que dejar fuera de este ‘premio’ a alguno de sus jugadores.