El nombre de Carles Gil gana enteros como candidato a reforzar el extremo izquierdo del cuadro verdiblanco.
El que fuera jugador del Elche y del Valencia, a sus 23 años, no está teniendo la importancia que se esperaba en el Aston Villa por lo que los ingleses podrían valorar una cesión hasta final de temporada. Y es que parece difícil que el Betis pueda hacerse en propiedad por un futbolista por el que se pagaron 4,2 millones el pasado mes de enero.