El PSG sigue insistiendo para llevarse a Sergio Busquets del Barça. El club que preside el qatarí Nasser Al-Khelaïfi se está poniendo tan pesado con la cuestión que a la entidad azulgrana no le ha quedado más remedio que darl precio por el futbolista: 150 millones de euros. Simple y llanamente, su cláusula de rescisión. Se le considera un jugador absolutamente fundamental y en ningún caso están dispuestos a negociar una cantidad diferente para que acabe abandonando el Camp Nou.
Así lo ha señalado el diario francés L’Équipe.