Se disputó al final el accidentado último partido de la temporada el Old Trafford. Después de la suspensión por un ‘paquete sospechoso’, que resultó ser una falsa alarma de bomba, ayer se jugó el encuentro contra el Bournemouth.
El Manchester United se impuso por 3-1 al Bournemouth, un resultado de todo prescindible, ya que necesitaban un 19 a 0 para lograr la cuarta plaza de Champions, pero la noticia estuvo en la reacción de respetable contra el técnico holandés.
A la conclusión del choque, Louis Van Gaal quiso tomar el micrófono para dirigirse a la parroquia del United. En las gradas se habían visto varias pancartas en contra del entrenador y los seguidores del Bournemouth le atacaron con cánticos de “serás destituido mañana mismo”.