Nunca han estado tan cerca como ahora las vidas de Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Apenas unos metros les separan en Ibiza, en donde ambos disfrutan de sus vacaciones veraniegas. Cristiano Ronaldo atraca su yate, que comparte con sus familiares más directos, en el muelle de la Marina Botafoch. A pocos metros se encuentra el yate de Messi, que también disfruta del paraíso ibicenco con sus familiares más próximos.
Messi y Cristiano Ronaldo, dos futbolistas unidos por una rivalidad excepcional, apenas han mantenido una relación a nivel personal. Los saludos protocolarios en los partidos y las cortas, pero educadas conversaciones que han cruzado en sus encuentros de la gala del Balón de Oro, de la que son asiduos y protagonistas principales en los últimos diez años.