El Barça pasó el trámite de su primer partido de pretemporada con una victoria ante el Celtic de Glasgow sin brillantez, pero sí con solvencia. Sin embargo, el nivel bajo del rival no sirvió para tapar las carencias de dos jugadores que tendrían muchas papeletas para no tener un gran protagonismo esta temporada, al menos no el esperado. Los dos futbolistas señalados son Jeremy Mathieu y el lateral Aleix Vidal. Ninguno de los dos estuvo a la altura.
El francés demostró una vez más que sus mejores días han pasado y esta temporada lo tendrá complicado para hacerse un hueco, de hecho, si fuera por Luis Enrique ya se habría ido al Besiktas.