Los jugadores del FC Barcelona, muy aficionados a las nuevas tecnologías, no han podido sustraerse del boom del verano, el juego de Pokemon Go. Don Balón ha podido saber que la fiebre que se ha instalado en el vestuario del FC Barcelona por la caza y captura de pokemons no le hace ninguna gracia a Luis Enrique, que ya ha pedido a sus jugadores que se abstengan del juego en cuestión al menos mientras permanezcan en las instalaciones del club o sometidos a su disciplina.