La Supercopa de Europa conquistada ante el Sevilla en Trondheim le ha dado a Zinedine Zidane su segundo título como primer entrenador del Real Madrid en poco más de ocho meses. Todo un récord para el francés, que ha caído de pie en la institución y que cuenta con el apoyo y el cariño de todo el vestuario. Por eso, ahora que apenas quedan 20 días para que se cierre el mercado de fichajes, está por ver si el club hace caso al técnico que, de momento, no sólo ha frenado la mala situación que se vivía con Rafa Benítez hace menos de un año sino que también ha devuelto al equipo a la senda de los títulos.
En este sentido, el tema más importante que queda por decidir es el referente al cierre definitivo de los componentes de la plantilla merengue. El Real Madrid cuenta ahora mismo con 24 jugadores en plantilla. De todos ellos uno saldrá seguro (Lucas Silva) y está por ver si se incorpora definitivamente a algún canterano más que no cuenta en esta relación, como el delantero Mariano Díaz. No parece que vaya a suceder. Pero a Zizou le gustan las plantillas cortas y teniendo en cuenta que de esos 24 futbolistas 21 son jugadores de campo, quizá haya que hacer un descarte más. Y los candidatos están claros.
James Rodríguez, Isco y Asensio son tres hombres con características similares y que juegan readaptándose a posiciones que no son exactamente las suyas, pues son mediapuntas en un sistema de juego en el que no existe esa posición como tal. El debate lleva en vigor todo el verano y se ha avivado mucho más desde que Zidane confirmó que Asensio se queda debido a su explosión como futbolista.
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