Roque Santa Cruz ha sido el mejor delantero paraguayo de los últimos años, pero tuvo un gran acompañamiento en la selección por parte de otras figuras guaranís de indudable calidad, como Nelson Haedo Valdez o Edgar Benítez. Tantos atacantes de capacidad comprobada ensombrecieron la figura de otros compañeros que podían estar a su altura, como es el caso de Pablo Zeballos, ese profesional que ha experimentado el fútbol en numerosos equipos americanos, e incluso en uno ruso, el exótico Krylya Sovetov.
Quizá fuera por esa discreta experiencia en Rusia por lo que la nueva salida de Zeballos de su país no es con destino a Europa, sino a Qatar. A sus 30 años, y con miles de fans e incluso más críticos en Paraguay por el último rendimiento que ha dado en el Libertad, se había unido ahora al Club Sportivo Luqueño, pero las ofertas le han tentado para cambiar de aires.