El portero inglés es una estrella no deseada en el Manchester City desde la llegada del técnico Pep Guardiola al banquillo ‘citizen’. Así lo expresó el catalán y confirmó esta decisión de no contar con Joe Hart, al fichar procedente del Barcelona la meta chileno Claudio Bravo.
Desesperado el internacional no se ha lanzado a la bebida, pero sí al juego con un efecto desastroso.
Hart ha encontrado acomodo a modo de préstamo en el Torino italiano y antes de su marcha para olvidar las penas decidió pasar la última noche en Inglaterra en un casino. Pésima decisión, ya que, según el diario británico ‘The Mirror’, el portero perdió una fortuna en las mesas de juego.