Que Antoine Griezmann se perfilaba como principal baza para competir como tercer hombre junto a Cristiano Ronaldo y Lionel Messi en la lucha por el Balón de Oro 2016 era una posibilidad compartida por muchos. Pero ahora, la separación entre la FIFA y France Football a la hora de conceder el prestigioso premio hará que los cambios puedan beneficiar al astro francés del Atlético de Madrid, que sigue sin ser favorito ni mucho menos, pero que podría haber ganado terreno con la decisión.
El divorcio hará que las normas para conceder el Balón de Oro regresen al formato que se estableció en 1956, cuando empezó a entregarse el premio. Al igual que sucedía hasta 2010, la decisión la tomará únicamente un jurado compuesto por periodistas de la publicación francesa, algo que siempre provocó que se sugiriese que France Football hacía lo posible por promocionar o intentar colocar lo más alto posible a los futbolistas de su país. Con el matrimonio con FIFA, que ha durado cinco años, el Balón de Oro era entregado en base a los votos de seleccionadores nacionales, capitanes de selección y periodistas de todas las partes del mundo, algo que tampoco ha estado exento de polémica.