La renovación del alemán Toni Kroos ha tenido importantes efectos secundarios en la Premier. Por un lado, el City de Guardiola se ha quedado sin uno de los jugadores que el técnico catalán deseaba para su proyecto y, por otro, el Arsenal se ve obligado a desembolsar más dinero si desea que Mesut Özil siga con los ‘gunners’.
El centrocampista alemán de los ‘gunners’ termina contrato en 2018 y su ampliación de contrato se encuentra en el aire. Özil exige al Arsenal una renovación que duplique su sueldo y desde el club no están demasiado por la labor. Mesut percibe 8,3 millones de euros anuales y pide como mínimo,
250.000 libras a la semana, es decir, 14,8 millones de euros por temporada, casi el doble.