José Mourinho hace tiempo que no puede dar sus habituales ruedas de prensa polémicas porque los resultados ya no le acompañan. Ahora el técnico portugués ha pasado a un perfil más bajo a la espera de que su Manchester United comience a carburar. Sin embargo, siempre tiene tiempo para dejar alguna flecha para herir alguna sensibilidad.
La última ha sido para su anterior jefe, el presidente del Chelsea Roman Abramovich, de quien ha reconocido para el diario inglés Mirror que no se llevaban tan bien como parecía: «Él nunca fue mi amigo.