Pep Guardiola y Yayá Touré se conocen bien desde su etapa en el Barça y saben que ambos son de ideas fijas y muy difíciles de cambiar. Eso no sería problema si esas ideas no chocaran. Este verano el técnico catalán llegó al Manchester City y prácticamente le dejó las maletas en la puerta al costamarfileño y eso no gustó nada a su agente Dimitri Seluk que abrió una guerra en los medios de comunicación contra el exentrenador del Barça.
Tras tener apartado del equipo a Yayá Touré durante varios meses Guardiola le dio una salida a la situación para un jugador que al menos hasta enero debía estar en la plantilla.